Descripción
En boca tiene un dulzor equilibrado por su acidez, lo que armoniza con sus sabores de miel, durazno, chabacano y un apenas perceptible especiado. Con textura aterciopelada y retrogusto prolongado. Se recomienda servir frío (8-10°C), acompañarlo de quesos azules, frutos secos y foie gras es la norma, pero se lleva muy bien con la comida asiática así como con un buen cheesecake.